Nadie permite que los Stars se apaguen y el Licey no encuentra la manera de detener la hemorragia y se hunde más profundamente en el sótano.
El miércoles en Tetelo Vargas un equipo verde caliente chocó con un azul opaco y el resultado fue obvio. El noveno oriental ganó 3-1 en el debut de Robinson Canó, quien jugó su primer partido profesional desde el 7 de febrero.
El derecho estadounidense Kutter Crawford (1-0) empató a los felinos murciélagos en cinco entradas sin hits, con tres bases por bolas y siete ponches, y cinco relevistas limitaron a los Capitanes a solo dos hits por el resto del juego. Con la madera, Sócrates Brito condujo en dos vueltas, Junior Lake se fue 3-2, con uno anotado, para impulsar la ofensiva. Un resultado que deja a los verdes solos en la primera posición con un récord de 8-4, mientras que los índigo se alejan en la última posición con 4-8. Perdió Albert Abreu (0-1), quien lanzó cuatro entradas de tres hits, una devolución, una base y tres ponches y el rescate correspondió a Wirfin Obispo (4).
Fue la cuarta victoria consecutiva para los liderados por Fernando Tatis Sr., nuevamente apoyados por un pitcheo efectivo que lidera la liga en porcentaje de carreras limpias con 1.78. Ponchó a 12 a la alineación azul, tres de ellos a Arístides Aquino y tres a Dawel Lugo, mientras que Hanley Ramírez y Dennicher Carrasco fueron anulados dos veces por esa vía.
Los gatos han perdido ocho de sus últimos nueve juegos.
Cano se fue 4-1. Emilio Bonifacio tuvo que abandonar el partido por un balón en el pie.